Actividades de otoño 2015
Hemos estado demasiado tiempo sin contaros nada, nuevas colmenas, nuevo colmenas de particiones, sí, hay mucho que contar. No daba tiempo, nada más que a llorar lo justo, la pérdida de nuestro fundador. Mi padre. Aquellas colmenas que estábamos montando, y con las que trabajábamos codo con codo, ¡justo la semana antes de su desaparición! Están por fin terminadas. -¡Cuánto se te echa en falta! Ahora el trabajo siempre está justo donde lo dejé, solía avanzar, (casi por si solo), cuando iba a verte, tras ocuparme de otras cosas y continuábamos juntos el tajo. El taller no es nada sin ti…
Siguiendo con los planes que establecimos en su día, existe ya un segundo colmenar criadero de enjambres en Buixcarró que, en muy poco tiempo dispondrá ya de NIPs habitados, el año próximo tenemos previsto hacer dos particiones como la que hemos hecho este año, en el que a pesar lo caluroso, seco y desafortunado, y gracias a las atenciones, la inmensa mayoría de estas nuevas colonias partidas, han sobrevivido al verano, es tarea nuestra, que también lo hagan al invierno, y podamos continuar aumentando nuestra cabaña apícola asilvestrada.
Este otoño será movidito, tenemos previsto acudir como expositores a las ferias de, el 9 d’Octubre en Alcoi y a la de EcoAltea, nuevamente en las proximidades de la Facultad de Bellas Artes de Altea.
Entre estas dos ferias, hay un evento al que sí quiero invitaros especialmente, estamos organizando un homenaje a Salvador, nuestro fundador: En colaboración con el departamento de Medi Ambient del Ayuntamiento de Alcoy, preparamos un modesto acto de despedida, ya que todo el colectivo de sus conocidos, amigos, y colaboradores, no pudieron despedirse de la persona, que tanto ha hecho por el voluntariado en esta ciudad.
Será un sencillo acto en el que le recordaremos, preparamos un pequeño pase de diapositivas musitadas y descubriremos la nueva placa homenaje, que presidirá su Albergue Apícola Municipal, en la partida de les Pedreres Blanques de Alcoy, su espacio, donde cuidaba con esmero los enjambres rescatados de la ciudad y donde, aún ahora, su tarea sigue viva; cinco de estos enjambres acogidos esta misma primavera, están siendo atendidos como si él siguiera allí.
Es en ese espacio donde reposan sus cenizas, donde yacen las últimas colmenas que él diseñó y fabricó, ofreciendo cobijo a los nuevos enjambres que las habitarán seguro, en venideras primaveras, en ese lugar, tan especial para él y que le dedicamos.
Nunca os agradeceremos más vuestro calor, vuestro afecto, y vuestra presencia.